Ácido Poliláctico (Bioestimuladores): El Ingrediente Estrella en Cuidado de la Piel y Más
Cada vez surgen nuevos ingredientes cosméticos que deberían formar parte de nuestra rutina de cuidado facial. Uno de los más recientes en acaparar la atención es el ácido poliláctico. Aunque este no es un ingrediente nuevo, se le han descubierto más usos de los que inicialmente se le atribuían.
Pero antes de adentrarnos en el tema, es importante comprender a fondo este ingrediente para conocer sus propiedades y los beneficios que puede aportar a la piel, así como las razones detrás de su creciente popularidad.
¿Qué es el Ácido Poliláctico?
El ácido poliláctico es un ingrediente que estimula la producción de colágeno, lo que se traduce en una piel más suave y tersa al combatir las arrugas. En realidad, tiene un efecto relleno, además de aumentar el grosor de la piel y crear fibras conectivas en su interior, lo que contribuye a una sensación de mayor tersura.
El ácido poliláctico se administra a través de pequeñas inyecciones que restauran la estructura y elasticidad de los tejidos profundos del rostro sin necesidad de cirugía. Es una sustancia biodegradable que se degrada con el tiempo, mientras el nuevo colágeno permanece. Los expertos suelen recomendar el uso de ácido poliláctico a partir de los 30 años.

¿Cuáles son los Usos del Ácido Poliláctico?
El uso principal del ácido poliláctico es en el ámbito de la cosmética, particularmente en el cuidado facial. Cada vez más bioestimuladores contienen este ingrediente, como Sculptra, que aumenta el colágeno tipo 1 en un 66,5% en solo 3 meses, alisa y reduce arrugas, restaura el volumen y mejora la luminosidad y calidad de la piel.
Los Beneficios del Ácido Poliláctico en el Cuerpo
Recientemente se han descubierto los beneficios del ácido poliláctico a nivel corporal, especialmente para mejorar la apariencia de los glúteos y los brazos. Un ejemplo es Lanluma X, que contiene una concentración de 630 mg y ha sido diseñado específicamente por los Laboratorios Sinclair Pharma para remodelar y contornear áreas amplias del cuerpo. Puede utilizarse para tratar los brazos superiores, caderas, muslos, rodillas, pantorrillas, manos, escote y glúteos, y se ajusta según el caso con diferentes diluciones.
Este ácido poliláctico también funciona como bioestimulador dérmico. A diferencia del ácido hialurónico convencional, que se utiliza para rellenar depresiones, el ácido poliláctico actúa como un relleno dérmico bioestimulante que estimula la producción de nuevo colágeno, mejora significativamente la firmeza y aumenta el volumen de forma natural, proyectando y redondeando las formas.
En resumen, el ácido poliláctico se ha convertido en un ingrediente versátil en el mundo del cuidado de la piel y la belleza, brindando beneficios tanto para el rostro como para el cuerpo. Su capacidad para estimular la producción de colágeno lo convierte en un aliado poderoso en la lucha contra los signos del envejecimiento y la búsqueda de una piel más tersa y rejuvenecida.